Si hay unos artesanos estrella en la Euskal denda esos son los dedicados a la producción agroalimentaria. Con la Navidad en ciernes, no es raro hacer acopio de sus productos, para degustarlos en los encuentros de las próximas fechas.
La oferta de este año la componen Queso de Ziorregi, que este año presentan unos tentempies a base de queso, pasas y nueces, sabroso a más no poder.
No faltan los turrones y chocolates de Gorrotxategi. De todos es sabido que su expositor suele generar largas colas para hacerse con uno de sus dulces, que desde luego nos alegra el día.
Los pates de
Katealde son un delicioso manjar de reyes que, en esa firma, saben cómo elaborar de forma magistral.
Las mieles naturales y exquisitas de Lorez lore eztia vuelven al escenario de la Euskal denda sabiendo que, la clientela de Durango es fiel a su sabor.
Cierra este periplo por los sabores más dulces, el puesto de Garrarte con sus garrapiñadas tradicionales, sus palotes y piruletas, una delicia para los pequeños y los no tan pequeños.
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